jueves, 28 de enero de 2010

La autonomía liberal que hay que erradicar


Este título me suena totalitario y antidemocrático, pero a continuación vamos a ver que lo autoritario y antidemocrático no es precisamente el título, sino precisamente la autonomía harto declarada por la ideología liberal en el caso de los bancos centrales.
Martín Redrado es el presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), hace algunas semanas recibió una orden de la presidenta del ejecutivo argentino, Cristina Fernández de Kirchner, sobre determinados lineamientos económicos. El funcionario se negó a acatarlas, lo que desató una verdadera batalla política y judicial en torno al caso –ya que Redrado se ha negado a renunciar-.
Redrado defendió el pasado miércoles ante la prensa “la autonomía y la independencia de criterios del Central” para conservas las reservas y hasta lo calificó como un “hecho histórico”.
“Estoy convencido de que estamos marcando un hito hacia adelante en la relación entre el Congreso, el Banco Central, las instituciones de la República para que nunca más ni las reservas, que son los ahorros de los argentinos, ni el Banco Central ni el Congreso sea avasallado, más allá de que circunstancialmente tenga la oportunidad de presidir el Banco Central”.
Un error del gobierno argentino le permite al neoliberal Redrado mostrarse como defensor de las reservas de los argentinos, pero el hecho es que el titular del BCRA no acató una orden del ejecutivo.
Esto abre la discusión.
¿Puede el BCRA o cualquier banco central ser autónomo e independiente de un ejecutivo?
Esto suele ser así porque los funcionarios de entidades como estas responden de manera inequívoca a políticas neoliberales, la mayoría de sus directores han pasado por organismos como el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional.
Cuando gobiernos progresistas llegan al poder, entonces se produce la colisión de intereses, y entonces nos dicen que estas entidades son independientes y que el gobierno no debe interferir.
Pero se supone que si el pueblo votó a un gobierno, son esas autoridades las que deben decidir cuál es la política económica del país.
Si Redrado tiene una idea de la economía diferente a la del gobierno argentino, pues que las explique y luego se presente a elecciones para que la gente lo elija, de otra manera debería renunciar -en primer lugar por una cuestión ética-.
Si los bancos centrales deben ser independientes a los gobiernos, entonces que la elección de sus directores se haga por elección popular, y que los candidatos presenten sus ideas económicas. No es democrático que un gobierno elegido por el pueblo no pueda tomar decisiones en materia económica porque el titular de un banco central no está de acuerdo.
La hipocresía de estos tecnócratas y de los que se hacen coro de sus argumentos no persigue otro objetivo que desestabilizar y poner piedras en el camino de los gobiernos que buscan romper la lógica de poder neoliberal.
A lo mejor el título fue totalitario y antidemocrático, pero la realidad es mucho peor.

miércoles, 27 de enero de 2010

martes, 26 de enero de 2010

Bolivia hacia el socialismo comunitario


Evo Morales es el nuevo presidente del Estado plurinacional boliviano, el pasado 22 de enero, juramentó su segundo mandato bajo la premisa de consolidar un Estado socialista y comunitario.
Para llevar adelante este ambicioso y revolucionario proceso, Morales cuenta con un inédito apoyo en la historia republicana de Bolivia. El pasado 6 de diciembre más de un 64 por ciento de los bolivianos apoyaron la candidatura del reelegido mandatario y de su vice, Álvaro García Linera.
Ese porcentaje de votos le permite al gobierno tener la mayoría absoluta en las dos cámaras legislativas, aspecto fundamental de la nueva gestión, ya que para rediseñar el nuevo Estado socialista (que se contrapone al actual Estado regido por una legislación neoliberal), es necesaria la aprobación de más de 100 leyes que no podrán ser frenadas por la oposición -que sí tuvo un importante poder de veto durante la gestión inicial (2006-10) de la administración del primer presidente indígena de Bolivia-.
Los aspectos más urgentes son relativos al combate a la corrupción, la reglamentación de las autonomías regionales y la denominada jurisdicción indígena originaria campesina -que institucionalizará la justicia comunitaria-.
La importancia dada a la creación del nuevo Estado plurinacional ha llevado al gobierno a decretar feriado nacional el 22 de enero, lo que equipara lo vivido actualmente en Bolivia con la primera independencia llevada a cabo por los libertadores hace 200 años.
Por supuesto esto es utilizado para atacar al gobierno. Uno de los voceros de la oposición aseguró que el próximo feriado será el cumpleaños del primer mandatario.
Adicionalmente, Evo Morales fue ungido por segunda vez como líder político y espiritual de los pueblos indígenas del mundo, en un ritual llevado a cabo un día antes en las milenarias ruinas preincaicas de Tiwanaku, antiguo centro de la cultura Tiwanakota.
La nueva Constitución Política del Estado aprobada tras arduas luchas en enero de 2008, estableció que por lo menos la mitad del gabinete ministerial del ejecutivo debe ser ocupado por mujeres.
Es por eso que en el nuevo equipo de trabajo del presidente, las carteras de Justicia, Planificación del Desarrollo, Medio Ambiente y Agua, Desarrollo Productivo, Desarrollo Rural y Tierras, Trabajo, Salud y Deportes, Defensa Legal, Culturas y Transparencia, son ocupadas ahora por mujeres.
Evo Morales había manifestado que el gabinete saliente era el mejor que había tenido Bolivia en toda su historia, es por eso que sorprendió mucho su decisión de excluir a tres de los hombres más fuertes de la anterior gestión. Juan Ramón de la Quintana, ex ministro de la Presidencia; Alfredo Rada, ex ministro de Gobierno y Walker San Miguel, ex ministro de la Defensa, fueron removidos de sus cargos.
De la Quintana declaró: “Este gabinete que hoy ha concluido sus funciones, señor Presidente, es uno de los gabinetes más transparentes y honestos. Es uno de los gabinetes que ha ayudado a forjar la nueva escuela de patriotismo que requiere el país.”
El ex hombre fuerte agregó “tenemos que admitir con humildad que ninguno de nosotros ha sido capaz de ponernos en sintonía con su energía (en referencia a Morales)”.
Eso fue lo más cercano a una explicación sobre el por qué de la salida de un funcionario cuya continuidad se daba por descontada.
La oposición festejó a coro la salida de estos 3 dirigentes. El ex prefecto de Santa Cruz, Ruben Costas (una de los principales promotores de los referendos autonómicos ilegales que pusieron en jaque al gobierno durante 2008) aseguró: “La verdad, celebro que estos dos personajes, Quintana y Rada ya no estén en el gobierno. Éstos que han sido como los denominados ‘ángeles de la muerte, de la injusticia y de la falta de democracia y de la libertad. Que esto sea una muestra de que se quiere de verdad encauzar y reencauzar el camino de todos”.
Para el ratificado canciller David Choquehuanca, “los cambios profundos que realizamos son luces para otros pueblos que luchan para cambiar sus historias. El desafío era grande, ahora la esperanza es compartida por la humanidad, porque la crisis ambiental, financiera, política y social no tienen solución a nivel local sino global”.
En la misma línea declaró el reelegido vicepresidente García Linera desde la Asamblea legislativa Plurinacional: “No hay revolución que triunfe sin el apoyo de otras revoluciones. El imperio es un demonio global, por eso se necesita otra globalización, la de los pueblos. El siglo XXI debe ser el siglo de los pueblos”.
Testimonio que engloba a Bolivia dentro de un proceso latinoamericano que tiene a Venezuela, Cuba, Nicaragua y Ecuador entre sus principales protagonistas. Todos ellos conforman la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), un encuentro de voluntades antiimperialistas que obtuvo gran trascendencia sobre el final del año 2009, al ubicarse a la vanguardia de las voces que cuestionan el orden impuesto por Estados Unidos.
La muestra más acabada de esto fue la cumbre por el cambio climático que se desarrolló en Copenhague, donde fueron los países del ALBA los únicos que denunciaron a viva voz los intentos de Washington y otras potencias por avanzar en la aprobación de un documento no consultado por la mayoría.
La frase destacada de Linera también pone sobre el tapete otro tema que puede marcar los procesos regionales durante los próximos años. No hay revolución que triunfe sin el apoyo de otras revoluciones. Si el ALBA es el espacio primario de integración para el proceso de cambio boliviano, Argentina y Brasil es el secundario, y en las dos potencias suramericanas podrían imponerse opciones de derecha (tal como acaba de ocurrir en Chile) durante el transcurso de 2010 y 2011, un escenario que podría provocar un duro retroceso en materia geopolítica, económica y cultural.
Venezuela también enfrenta un proceso electoral durante la segunda mitad de 2010, allí se renovarán los integrantes de la Asamblea Nacional, y la victoria de las huestes chavistas está muy lejos de estar asegurada. Una derrota allí indudablemente significaría un golpe muy duro para las necesidades expresadas por el vicepresidente mientras era observado atentamente desde los palcos por Hugo Chávez, Rafael Correa, Fernando Lugo y el príncipe Felipe de Borbón.
Bolivia en general y el gobierno de Evo Morales en particular, tienen un enorme desafío por delante. Derrumbar la cultura capitalista para erigir la socialista y comunitaria no deja de ser una utopía hasta el momento.
El Presidente conoce las dificultades a las que se enfrenta, y es por eso que durante su discurso de asunción ante la Asamblea, aprovechó la oportunidad para lanzar algunos lineamientos político-ideológicos sobre uno de los pilares en los que se sustenta la sociedad boliviana, y en el que evidentemente todavía queda por delante implementar un enorme proceso de transformación:
“En algunos institutos militares siguen enseñando a los nuevos oficiales de las Fuerzas Armadas que el enemigo es el socialismo. Hay que cambiar eso, el verdadero enemigo es el capitalismo, no es el socialismo, y tenemos que tener nuevos oficiales con orientación ideológica”.
De cara a la materialización de la anteriormente calificada utopía, me vino a la mente una frase que descubrí escrita en una pared de Asunción, la capital paraguaya. Decía así: “Quien hace, puede equivocarse, quien nada hace ya está equivocado.”


PD: El pasado lunes Evo Morales realizó un anuncio en la dirección del cambio cultural necesario. Pidió a los periodistas que luchen contra el capitalismo y anunció su decisión de normar a los medios de comunicación para que no mientan. Sus comentarios obviamente despertaron la reacción de los medios tradicionales en toda la región.
No hace falta agregar que la inmensa mayoría de los medios privados bolivianos están entregados desde la asunción de Morales a la defensa del capitalismo neoliberal y al combate de las ideas impulsadas por el mandatario.

miércoles, 20 de enero de 2010

Haiti en medios de una guerra



Escrito junto a Rafael Rico Ríos

¿Quién iba a pensar hace 15 días que Estados Unidos estaría hoy lanzando una operación militar para invadir en Haití?
Esta nueva aventura imperial disparada, por el terremoto del pasado 12 de enero, nos tomó por sorpresa a todos -menos a Estados Unidos-.
Y como no podía ser de otra manera, el ejército cultural del sistema (medios de comunicación) pone todos sus esfuerzos en disfrazar de operación humanitaria esta nueva invasión militar y política.
Este es el renovado escenario de una guerra mediática en la que se manejan 3 ejes principales:

1. La presencia militar de EE.UU. en Haití es para brindar ayuda humanitaria a un pueblo castigado.
2. En Haití hay caos y por ende debe imponerse el orden y la disciplina.
3. Los marines son los únicos capaces de hacerlo, ya que, el resto de países nucleados en torno a la misión militar de la ONU (MINUSTAH) no están a la altura de las circunstancias.

Veremos algunos ejemplos que sustentan estos ejes basados en el monitoreo de 2 medios participantes habituales en las campañas mediáticas norteamericanas: CNN y el diario El País de España.

El periódico madrileño titula el lunes 18 a última hora:
EE UU llega a Haití para imponer el orden. (ejes 2 y3)
En el subtítulo, el enviado Pablo Ordaz dice: “Las tropas estadounidenses lanzan a su llegada a Puerto Príncipe el mensaje que la misión de la ONU no había logrado transmitir en siete días: “Ya estamos aquí. Y os vamos a ayudar”. (eje 3)
El día martes la noticia seguía colgada pero el subtítulo había cambiado, ahora podía leerse que “ante la inoperancia de Naciones Unidas, el pueblo haitiano se encomienda a Estados Unidos para huir del desastre y del hambre”. (Eje 3)
Esta visión es desmentida por un sensato enviado de CNN, Kart Penhaul, quien, el martes por la tarde, se atreve a reportar desde Puerto Príncipe lo siguiente:
“Esta llegada de las tropas norteamericanas no ha sido vista con buenos ojos por la totalidad de la población. Hemos hablado con algunas personas en las multitudes haitianos (sic) que dicen por qué están llegando hombres con fusiles cuando lo que necesitamos es comida, agua y medicinas. Esa es una opinión repetida por algunos de los médicos aquí en el hospital quien dicen por qué pudieron traer nueve helicópteros llenos de tropas, más no de medicina vital que necesitan en este momento”.
Pero, para ese momento, la sede de CNN en Atlanta manejaba otro discurso, demasiado parecido al oficial del gobierno estadounidense.
Cuando terminó el reporte de Penhaul, intervino la presentadora Glenda Umaña quien justificó la intervención estadounidense: “También se están encargando de la seguridad, sería una de las razones por las cuales tienen que llegar armados. Muchas gracias Kart Penhaul, uno de nuestros enviados especiales”. (Eje3)
No es ésta la única evidencia de la imposición de una política informativa tendiente a justificar la intervención militar.
Minutos antes, la misma presentadora, leía uno de los titulares del informativo: “Decenas de infantes de marina estadounidenses llegan con agua y alimentos para ayudar a los haitianos”. (Eje 1)
Ante este titular, es de esperar una imagen de algún asistente marine salvador repartiendo insumos entre la castigada población haitiana, pero no, lo que podía observarse era a un soldado armado con un fusil y en posición de combate.
Esa imagen debió titularse: “Decenas de infantes de marina estadounidenses ocupan Haití y se preparan para combatir a las víctimas del terremoto”. Algo que se acercaría más a la realidad después de amenazas como las del Comandante de la Costa Guardia de EE.UU, Christopher O'Neill, que advirtió que el objetivo "es interceptar en el alto mar y repatriar" a los haitianos que intenten salir del país.
La siguiente entrega de la cadena fue conducida por Daniel Viotto, durante la misma entrevistó al primer ministro Jean Max Bellerive.
La intención del periodista (y de la cadena) nuevamente era justificar la invasión estadounidense en base al caos reinante. Esta fue la segunda pregunta realizada por el conductor:
“Le preguntaba la cuestión del control en su país, no solo en lo que se refiere a tareas de asistencia y rescate de personas y comenzar a recuperar al país de esta catástrofe sino lo que hemos visto en estos últimos días, gente saqueando negocios, actos de violencia y vandalismo en las calles, entre medio de los escombros y la presencia de numerosos efectivos militares de Estados Unidos que están llegando en estas horas a Puerto Príncipe, ¿esto puede darnos una idea que Haití necesita fuerzas extranjeras para mantener el orden en el país?”. (Ejes 2 y 3)
En la misma línea de justificar el control militar de Puerto Príncipe, el enviado especial de El País, publica el martes por la tarde: “Las tropas de EE UU asumen el control de Haití para garantizar la ayuda humanitaria”.
(Eje 1)
Otro titular del mismo martes informaba: “EE UU exhibe fortaleza aérea pero la principal ayuda llegará por mar”. (Eje 3)
¿Fortaleza aérea? ¿Contra quién combate Washington en Haití?
El pasado 16 de enero, Hillary Clinton, acompañada por el Director de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID), Rajiv Shah, llegó a Puerto Príncipe en un avión militar estadounidense para entrevistarse con el presidente Préval. Firmaron un “memorando de entendimiento”.y, poco después, la Fuerza Aérea de Estados Unidos comenzó a controlar el tráfico en el aeropuerto internacional de Puerto Príncipe, posteriormente, el Palacio de Gobierno, el Parlamento y otras instalaciones estratégicas de la capital Puerto Príncipe.
Se han desplegado, en esta operación “humanitaria”, un total de 10.000 soldados estadounidenses, dos mil de la Unidad Anfibia de la Marina y de la 82 División Aerotransportada, un buque de asalto anfibio USS Bataan (LHD 5), barcos de desembarco USS Fort McHenry (LSD 43) y USS Carter Hall (LSD 50), el portaaviones USS Carl Vinson con buques de apoyo, el buque hospital USNS Comfort, helicópteros de los Guardacostas y otros navíos militares.
Con todo este impresionante despliegue militar, el miércoles 20, lo que se intentó montar fue una maniobra de distracción para que los medios no siguieran hablando de la intervención militar estadounidense.
El agente de la CIA, y secretario de Defensa estadounidense Robert Gates, ofreció una conferencia de prensa desde la India para informar que su país enviará buques adicionales para ayudar en la reconstrucción de Haití.
Es una típica operación de inteligencia orquestada por Gates, reclutado por la CIA a fines de la década del ´60. El actual secretario de Defensa trabajó por esa época como analista de inteligencia a tiempo completo. En la década de l os 80 fue subdirector de la Central de Inteligencia y a principios de los 90 Director. Se trata de un especialista en este tipo de operaciones.
Con esta nueva operación, la noticia deja de ser el despliegue militar y se concentra en la ayuda humanitaria. El Pentágono -que lidera Gates- reforzó esta matriz al informar el mismo miércoles sobre la llegada a costas haitianas del hospital naval Comfort. Así se fortalece el trascentental Eje 1 con resultados concretos.
CNN abrió su noticiero de la mañana, otra vez en la línea exacta emanada desde el Pentágono con el presentador Carlos Montero : “Queremos comenzar esta media hora de Haití en una jornada donde se espera en las próximas horas la llegada del hospital naval Comfort, un hospital naval estadounidense para atender a los miles de damnificados”.
Estos ejemplos fueron observados en un lapso de apenas 48 horas y son una evidencia más de la falta total de independencia informativa y rigurosidad periodística.
Sobre el papel de las tropas estadounidenses en Haití, el relato periodístico más logrado lo debe haber hecho alguien que no es periodista, el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, quien el pasado lunes recorrió las calles de Puerto Príncipe: “…que no salva vidas, que no lleva alimentos, que no levanta los escombros, que no recoge cadáveres, sino que simplemente está ahí para hacer una presencia militar y nuestro temor es que esa presencia militar quiera convertirse en permanente”.

viernes, 15 de enero de 2010

¿Qué planea EE.UU. en Haití?


Extractos de un cable de la agencia EFE del viernes 15 de enero:

EE.UU. elevará a 10.000 soldados su presencia militar en Haití antes del lunes

Washington, 15 ene (EFE).- EE.UU. enviará en los próximos días nuevas dotaciones militares a Haití, entre ellos varios buques de guerra y helicópteros, lo que hará que se multiplique su presencia militar de 1.000 a 10.000 soldados antes del lunes, según el jefe del Estado Mayor Conjunto, almirante Mike Mullen.
El secretario de Defensa, Robert Gates, quien compareció en una rueda de prensa junto a Mullen, negó que la presencia militar de EE.UU. en Haití sea vista como una fuerza ocupante por parte del país caribeño, sino como un "alivio".
"No creo que nos vean así", como una fuerza ocupante, dijo el jefe del Pentágono. "Dado que estamos dedicándonos a repartir agua y comida y atención médica, yo creo que la reacción (del pueblo haitiano) es de alivio, al ver que Estados Unidos les da este tipo de ayuda".
Gates indicó que la primera prioridad es repartir agua y comida a la comunidad lo más rápido posible, para "evitar que, debido a la desesperación de la gente, la seguridad se deteriore o haya un brote de violencia".
Estados Unidos ha comenzado a desplazar a la costa haitiana algunos de sus más importantes buques de guerra. Hoy mismo, según dijo Mullen, llegó el "Carl Vinson" cargado con 19 helicópteros y con una capacidad de 51 camas de hospital, tres salas de operaciones quirúrgicas, y la capacidad de producir cientos de miles de litros de agua potable al día.
El destructor "Higgins" también se encuentra en la zona para labores de búsqueda, socorro y apoyo, así como varios barcos medianos de la Guardia Costera con sus helicópteros, que ya están prestando su apoyo a la población.
Una compañía de la 82 División Aerotransportada de EE.UU., formada por unos 100 soldados, se encuentra ya en Haití preparando el campamento para la llegada durante el fin de semana, del resto de la brigada (unos 3.500 soldados de Infantería del Ejército de Tierra).
En el curso de la próxima semana llegarán otros dos buques de guerra que llevan helicópteros: el crucero "Normandy" y la fragata "Underwood" ambos equipados con misiles dirigidos.
También irá el buque "Bataan" de asalto anfibio que tiene capacidades similares a las del portaaviones "Carl Vinson", acompañados por las otras dos naves del grupo de asalto anfibio, el "Fort McHenry" y el "Carter Hall".
Esta flotilla transporta la 22 Unidad Expedicionaria de la Infantería de Marina (unos 2.000 soldados).


Análisis:
Gates dice que no cree que los haitianos vean a los soldados estadounidenses como ocupantes sino como un “alivio”. Esto es exactamente lo mismo que decía Donald Rumsfeld cuando invadieron Irak.
Todos los medios están informando estos hechos con la misma intencionalidad que le imprime la versión oficial de Washington, que lo único que se busca es ofrecer ayuda humanitaria a Haití.
Mientras países como México, Reino Unido, Argentina, Uruguay, Venezuela, Nicaragua y otros envían a sus equipos especializados en catástrofes naturales para colaborar con la sociedad haitiana; Washington despacha al “destructor Higgins”, a dos buques de guerra equipados con misiles dirigidos y a los buques “Bataan”, “Fort McHenry” y el ”Carter Hall” (estos últimos 3 son de asalto anfibio).
Además la corresponsal de CNN en Washington informó ayer que la flotilla que transporta la 22 Unidad Expedicionaria de la Infantería de Marina, está compuesta por 2200 de los famosos marines que realizarán tareas de control interno dentro del territorio haitiano.
Otros soldados simplemente se quedarán en los barcos, según lo que afirmó Michael Mullen.
El presidente Barack Obama anunció 100 millones de dólares en ayuda humanitaria para Haití, pero no lo hizo rodeado de sus asesores en materia social y humanitaria, lo hizo rodeado de su gabinete de guerra.
Lo primero que habrá que entender es que esos 100 millones no deben ser para ayuda humanitaria sino para solventar los gastos de movilización militar anunciados (¡10 mil soldados!)
No sé qué buscará Estados Unidos en Haití, pero sí sé que sus intenciones (como siempre y en virtud de estos elementos) no pueden ser sanctas.
Adicionalmente, si yo fuera el Ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cuba, no estaría distraído ni un minuto.
Nunca se sabe qué es lo que se puede esperar de estos buenos muchachos, no vaya a ser que aprovechen la volada para hacer un tour humanitario por Cuba con sus destructores y buques de asalto con miles de soldados a bordo.
Y cuidado que el gobierno de Cuba acaba de permitirle a Estados Unidos realizar vuelos humanitarios sobre su territorio para ayudar a la población haitiana. No vaya a ser que los halcones de Washington aprovechen la oportunidad para llenar de bombas algún avión, informar que traslada suministros y bombardear a la mayor de las antillas.
Nada de esto parece lo más probable, pero…

jueves, 7 de enero de 2010

Breve crónica de la desestabilización imperial en América Latina


Los intentos de desestabilización contra los procesos de cambio en la región están a la orden del día. La última denuncia llega desde Venezuela, donde el vicepresidente Ramón Carrizales aseguró que autoridades de ese país detectaron un sobrevuelo de un avión estadounidense sobre la isla de la Orchila, donde Venezuela mantiene una base militar.
Esos sobrevuelos partieron desde Curazao, isla que Holanda mantiene bajo estatus colonial, y donde Washington posee bases militares desde la segunda guerra mundial. Esta isla está a pocos kilómetros del territorio venezolano, esto quiere decir que Estados Unidos mantiene virtualmente cercada a Venezuela, si se piensa que además hay que sumar las 7 bases que Obama aprobó instalar en Colombia.
Una semana antes, el presidente Hugo Chávez había denunciado otra incursión aérea estadounidense, esta vez mediante un avión no tripulado y desde una de las bases emplazadas en Colombia.
El fin de semana pasado desde Quito, el presidente ecuatoriano Rafael Correa mostró una serie de correos electrónicos que forman parte de una campaña impulsada por organizaciones no gubernamentales financiadas desde Estados Unidos para generar en Ecuador una situación similar a la vivida hace algunos meses en Honduras.
"Tenemos informes de inteligencia que demuestran con datos, cifras (...) que están incluso recibiendo ayuda, ni siquiera del Gobierno de Estados Unidos, sino de organizaciones de extrema derecha" de ese país, dijo Correa.
En Paraguay Fernando Lugo no está más tranquilo, los rumores sobre el inicio de un juicio político en su contra son permanentes y esta semana volvieron a ser noticia.
La derecha paraguaya parece haber aprendido que un golpe de Estado al estilo hondureño es demasiado escandaloso; más fácil es destituir al presidente mediante la votación de la mayoría parlamentaria que ostentan.
En medio de todo este panorama, Estados Unidos volvió a recibir en su tierra a un representante de la derecha y prófugo de la justicia latinoamericana, se trata del boliviano Manfred Reyes Villa, quien tiene causas pendientes por corrupción ante la justicia de su país. Reyes Villa fue el último candidato a la presidencia por la oposición en Bolivia, además de ser uno de los militares entrenados por la tristemente célebre Escuela de las Américas.
Otro punto en este escenario de desestabilización lo suma la detención de un presunto agente de la CIA en Cuba, el hombre fue capturado hace un par de semanas por las autoridades de la isla mientras repartía equipos satelitales a los llamados miembros de la disidencia, habituados a recibir cuantiosos aportes de la inteligencia estadounidense.
Este miércoles, el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alracón, informó que este ciudadano estadounidense fue contratado por una empresa que recluta para los servicios secretos estadounidenses.
Esa es una nueva adquisición que hay en Estados Unidos, y son agentes, torturadores, espías, que en la privatización de la guerra los contratan, explicó el líder parlamentario en conversación con reporteros en La Habana, según reportó de Prensa Latina.
Y si de procesos de desestabilización se habla, el caballito de batalla de la administración Obama es el experimento hondureño, donde acaba de finalizar su quinta visita en pocos meses el subsecretario de Estado para Asuntos Hemisféricos, Craig Kelly.
La visita de este enviado la explicó muy bien el vocero del departamento de Estado P J Crowley, quien afirmó desde Washington que Kelly quiere “ver como Estados Unidos ayuda a Honduras a avanzar, superar y borrar la tensión que resultó del golpe de Estado”.
Obama cumplirá su primer año de mandato en estos días y para su segundo de mandato sus objetivos no parecen diferir en nada de los de su antecesor George W. Bush.
Para avanzar (parafraseando a Crowley), el mandatario y su administración no cesarán en su intento por superar y borrar a Chávez, Evo, Correa, Lugo y de paso cañazo a la revolución cubana.
No la tienen fácil pero soñar no cuesta nada (y Honduras sienta un peligroso precedente).